A veces la vida te da sorpresas que nunca te hubieses imaginado, y este verano ha sido así, sino me sigues por instagram ni facebook no sabes de lo que estoy hablando por eso quiero contar mi historia por aquí…
Os pido disculpas por no estar al día no escribir a menudo, pero no paramos, mi niña no me deja parar, es muy inquieta y desde que ha empezado a andar no para y hay que tener mil ojos con ella.
Empezamos en 3, 2, 1…
En junio nos lanzamos a la búsqueda del tercer bebe, parecerá una locura pero a mí me hacía ilusión, me encanta la idea de ser familia numerosa y tener tres hijos, me daba igual lo que fuera además no quiero que se lleven mucho ya que el niño hará cinco años en noviembre.
Estábamos ilusionados y contando cuando nacería, el primer mes en junio no me venía la regla, me hice varios test y negativos, también probé los de ovulación que de mi hijo me predijeron embarazo, y en también me salían positivos pero los de embarazo no daban, os tengo que contar en otro post.
Total que me fui por urgencias y me encontraron un quiste hemorrágico, de 1,3mm, y por supuesto beta negativa, me dijeron que no me preocupara que hubiera que vigilarlo y controlar ya esta, vida normal y seguir buscando.
Por supuesto estaba muy asustada, mire en internet (que es lo peor que se puede hacer pero todos y todas lo hacemos) y que burradas pone, paso el siguiente ciclo y me bajo la regla por tanto no me quede en julio, fui a revisión y ya había desaparecido, menos mal, pensé, porque lo justo que quieras algo que zas, te pasan otras cosas.
En agosto vuelta a la búsqueda, nos la tomamos con calma, sin prisas y sin agobios, porque la verdad como le dije a mi ginecóloga si viene bien y sino también bien, pero la verdad tenía esa espinita dentro e ilusión por volver a estar embarazada.
Este mes se me adelantó la ovulación, tendría un ciclo de unos 30 días, si la hubiese tenido como siempre me pilla en plenas vacaciones, cuando termino mis días fértiles, no sentí nada en especial, algún aislado de pecho, y algún dolor de ovarios.
Si recuerdo que hubo días que me dolía mucho el estomago, todo me sentaba mal, no vomitaba porque soy muy difícil de vomitar, pero el malestar no se me iba, a tres días de mi supuesta regla vi mi positivo, lo vi muy positivo… en comparación con los de mis hijos y mi estrella.
Fui haciéndome e iba subiendo de intensidad, me compré un clearblue porque no se a vosotros y vosotras pero sientes el ansia diría yo de ver las palabras “EMBARAZADA” hace verdadera ilusión y no ver las dos rayitas.
Llame a mi clínica y me dieron cita para el 10 de septiembre, justo hoy, pero la verdad me pareció mucho un mes, entonces como mi gine estaba de vacaciones me citaron para el 28 de agosto.
Nos fuimos de vacaciones, la verdad iba en plan estoy recién embarazada, con dos niños pequeños, la playa, piscina, andar… a ver cómo va todo.
Por cierto me hice una beta antes de irme y me dio 340 por tanto todo se ajustaba estaba de 4 o 5 semanas.
Volvimos de la playa que lo pasamos genial, y contando los días para ver a nuestro garbancito, estaba nerviosa mucho, y por fin llego el día, no era mi ginecóloga, pero bueno era de la clínica y la conocía ya que alguna vez me vio de mi hija.
Me empezó a explorar ese día hacia justo 7 semanas, y mi peque estaba de 6+2, era normal que no se ajustara, le vimos el puntito parpadear, y se oía pi pi, aislado, me dijo que el corazón quería empezar a arrancar a latir, que estuviera tranquila, le pregunte solo hay uno no?, me volvió a mirar en la bolsa, y le dije hay otra manchita blanca no?
Y me dijo si hay dos, no sabía si reír o llorar me saco el ecografo y me dijo que había que controlar mucho ya que estaban en la misma bolsa eran gemelos, yo no tengo antecedentes y por edad creo que soy joven tengo 35 años, salimos en shock, mi marido apenas los vio, porque se quedo en la consulta con los niños, no le dijimos nada a ninguno y menos a mi príncipe.
No sabíamos como tomarlo, fue una verdadera sorpresa…
Continuara…